Sí, sí, que no me he equivocado, que va de aves la cosa.
Me explico; Ayer pude constatar fehacientemente el rotundo éxito con el compostaje que llevamos a cabo en casa.
Al cerrar la ventana del cuarto de las niñas, al poco de anochecer, posada en el pino que hay al lado del cajón de materia orgánica para compostar, había posada una espectacular Lechuza (Tyto alba) al acecho de los micromamíferos que medran alrededor de tan apetecible monton de comida.
En los manuales de compostaje casero, la mayoría de los autores recomiendan abstenerse de realizar aportes demasiado suculentos para evitar la visita de vecinos "poco deseables". Nosotros hacemos todo lo contrario, echamos casi todos los restos de cocina de origen vegetal ( no animal por los olores...) con ánimo de alimentar una pequeña población de ratones y topillos, para que a su vez pasen a formar parte de la dieta de las rapaces nocturnas del lugar. De esta manera se han acercado ya a los aledaños de nuestra vivienda bastantes Autillos y algún que otro Mochuelo. Y por supuesto la magnífica Lechuza, que ayer se dignó a visitarnos.
He de añadir que el cajón se encuentra protegido con mallazo de gallinero de luz muy pequeña (esto es poco diámetro del agujero) para impedir el paso a las ratas, que estas sí que son realmente poco bienvenidas en las cercanías del hogar. Con los ratones, topillos y alguna que otra Musaraña no tenemos mayor problema, más bien todo lo contrario ya que gracias a ellos podemos disfrutar de observaciones muy buenas y saber que además unas aves con un estatus de conservación no muy favorable se benefician un poco.
Un saludo desde Collado Mediano.
Una idea estupenda, compañero!
ResponderEliminarGa
Como dice Gabi, idea estupenda y envidia sana que nos das. Saludos
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