2015

CACERÍA DE ÁNSARES EN LA LAGUNA DE LA NAVA-PALENCIA

Mañana se podrán cazar ánsares en la propia laguna de La Nava. Si, aunque parezca una broma no lo es. Mañana sábado día 27 de diciembre, la Junta de Castilla y León tiene prevista la realización de la primera de unas cuantas cacerías de gansos desde puestos fijos ¡situados a 250 metros de la laguna!.

Al final veinte años de esfuerzos y trabajos de conservación han servido para esto, para que La Nava acabe convertida en un tiradero de patos. Algo nos dice que los responsables de la gestión de la caza en Palencia, con su jefa de servicio Esperanza García Corvo al frente, no es que no estén haciendo bien su trabajo, es que han perdido el sentido común.

Las decenas de visitantes que acudan mañana a ver la laguna disfrutarán de un espectáculo único, el trompeteo de los ánsares será sustituido por el estruendo de las escopetas, mientras "disfrutan" del educativo espectáculo para los niños de ver como caen abatidos decenas de pájaros. Esto es para lo que algunos quieren los Espacios Naturales.
¿No hay nadie en la Junta de Castilla y León con algo de sentido común?. ¿No es suficiente poder cazar en miles y miles de hectáreas de Tierra de Campos que hasta dentro de los humedales se tiene también que cazar?.

Para que la gente se haga idea de lo se avecina, aquí os dejamos unas fotos de esta misma tarde. La primera está hecha desde los puestos, y lo que se ve al fondo (donde está el coche) es el borde de la laguna. La segunda son los cazadores señalizando los puestos, la foto está hecha desde el observatorio de Corralillos. La última es de un ánsar careto grande abatido hace unos días en la Nava, es una especie no cinegética, pero da igual, lo importante es disparar y que unos pocos "afortunados" se lo pasen bien.
Por favor, difundir este mensaje, al menos que los ciudadanos se enteren de a que dedica la Junta de Castilla y León sus esfuerzos y como gestiona nuestros recursos naturales.

 Asociación de Naturalistas Palentinos - ANPA

TALLER DE CAJAS NIDO EN LOS ARROYOS-EL ESCORIAL

El pasado sábado, 20 de diciembre, se llevó a cabo la actividad prevista de construcción y colocación de cajas nido, en colaboración con el Ayuntamiento de El Escorial. Participaron un total de 18 niños y otros tantos adultos. Por parte del grupo estuvieron Luis Cabrejas, Luis Alcaraz, Jesús Ramírez y Benjamín Berdiales; por parte del ayuntamiento nos acompañó Ignacio Belaunde,  concejal de Medio Ambiente de El Escorial.

La mañana comenzó fría, pero despejada, por lo que, según fue avanzando el día, el sol hizo que la jornada fuese ideal para esta actividad al aire libre.

Comenzamos con una charla, impartida por Jesús, en la que se habló de la importancia y utilidad de la colocación de cajas nido, de las especies que habitualmente hacen uso de ellas y de algunos criterios para su colocación y conservación. Mientras Jesús hacía esta introducción, sucedió la anécdota graciosa del día, y es que un hombre, que venía cargado del rastrillo que se celebraba en el edificio de al lado, se acercó con la intención de comprar un par de las cajas nido que teníamos de muestra.

Tras esto, se pasó a la actividad propiamente dicha. Se dividió a los niños por equipos, y, bajo la supervisión de algún adulto (bien sus padres, bien algún miembro del grupo), comenzó el repiqueteo de los martillos, que comenzaban a dar forma a las cajas.

Y, confirmando que la juventud es sólo un estado de ánimo, nos encontramos pequeños y grandes construyendo cajas para un estupendo proyecto.

Finalmente se completaron doce cajas, marcadas y adornadas con gran esmero, y que procedimos a colgar en la orilla del arroyo Ladrón. Sus constructores fueron testigos de su colocación, y se comprometieron a vigilarlas y protegerlas para asegurarse de que cumplen su función a partir de esta primavera.

Benjamin Berdiales

TALLER DE CONSTRUCCIÓN Y COLOCACIÓN DE CAJAS NIDO EN LOS ARROYOS (EL ESCORIAL)

En colaboración con la Concejalia de Medio Ambiente del Ayuntamiento de El Escorial, el proximo sabado 20 de diciembre celebraremos un taller de construcción y colocación de cajas nido en Los Arroyos. 

La actividad se desarrollara de 11 a 13 hora en la plaza del Centro Comercial de los Arroyos junto al Mercadona.

Se montaran primero las cajas nido desplazandonos a continuación a los alrededores para su colocación.

La actividad es gratuita y precisa inscripción previa por email a:

seo-sierradeguadarrama@seo.org, tlfno. 639068080

¡Os esperamos!

Planos del punto de encuentro

Salida a la Laguna del Oso

El lunes, 8 de diciembre, aprovechando la fiesta y el relativo buen tiempo, Luis Alcaraz, Jesús Ramírez, Raúl, Antonio Caballero, Eva, Leyre, Laura y el que esto escribe decidimos acercarnos a la Laguna del Oso. La idea era disfrutar con las invernantes que allí se reúnen (sobre lodo los ánsares) y con las grullas que todavía quedasen en paso, y, a ser posible, tratar de localizar los ánsares caretos que ya se habían dejado ver por allí en días pasados.

El día ya prometía según nos acercábamos por la carretera: muchos ratoneros posados en los postes y algún milano real que comenzaba a dar sus primeros vuelos. Pero cerca ya del pueblo del Oso divisamos posado sobre una loma la primera sorpresa de la mañana: un buitre negro nos observaba desde la lejanía. Casi sin darnos tiempo a asimilarlo, otro bombazo: un pajizo de imperial nos sobrevoló, exhibiéndose para que pudiésemos contemplarlo a placer, mostrándonos la captura que llevaba en sus garras. Finalmente, un ratonero de pecho sorprendentemente blanco nos dio paso desde lo alto de una señal de tráfico.

Ya en el pueblo, cafetito reparador y comentarios animados: el día había comenzado bien y continuaba con buenas perspectivas. De camino al observatorio, un grupo de avefrías picoteaba en los prados, al lado del camino, pero levantaron el vuelo cuando paramos el coche para contemplarlas mejor; llegados allí, el inconfundible graznido de los ánsares nos indicaba que la laguna iba a estar animada.

Desde el observatorio se confirmó la animación: varios cientos de ánsares comunes ocupaban buena parte de la lámina de agua y pastaban por los prados cercanos. Les acompañaban una buena cantidad de ánades azulones y cercetas comunes, a los que, poco a poco, pudimos ir añadiendo algunas otras especies: silbones, rabudos, cucharas… una cigüeña común y una garza real cubrían la cuota de zancudas, y la de limícolas exclusivamente alguna avefría. Nos llamó también la atención un cormorán grande que llegó un poco despistado y se sumergió de inmediato para ver qué encontraba. Finalmente, tras una paciente espera, conseguimos ver los ansiados ánsares caretos: al menos un par de ellos que se dejaron ver a través de la ya intensa calima.

Foto de Luis Alcaraz

Por los alrededores se mostraban algunos aguiluchos laguneros que causaban cierta inquietud entre los ánades, algún cernícalo vulgar, un halcón peregrino que pasó rápidamente por allí... Además, tarabillas, escribanos palustres, buitrones, trigueros, ruiseñores bastardos… daban vida a los campos de alrededor.

Foto de Benjamín Berdiales

Para no acaparar el observatorio, y para tener una perspectiva diferente de la laguna, nos dirigimos hacia el observatorio de la embotelladora. Allí, a pesar de tener una visión un poco más clara, no conseguimos volver a localizar los ánsares caretos, así que, como ya nos empezábamos a quedar un poco fríos, y como veíamos que ya comenzaban a llegar las grullas, decidimos tomar un tentempié y acercarnos después a un campo cercano donde éstas suelen congregarse.

Foto de Benjamín Berdiales

Foto de Benjamín Berdiales

Desde una distancia prudencial, aunque cómoda, pudimos verlas a placer: un grupo de unas noventa que fue aumentando hasta aproximadamente ciento cincuenta; jóvenes y adultos, comiendo o descansando...

Foto de Benjamín Berdiales

Pero la guinda de la tarde fue una hembra de halcón peregrino, posada en el suelo, al parecer comiendo una captura, que fue luego hostigada por un macho que tuvo que sufrir los malos modos de su congénere y salir volando de allí.

Ya terminando la jornada, un aguilucho pálido nos deleitó con un larguísimo vuelo rasante mientras trataba infructuosamente de cazar la cena. Finalmente, las grullas decidieron que ya era hora de irse a dormir, y nosotros, siguiendo su ejemplo, pusimos fin a una fría, aunque muy intensa jornada de campo y aves.

Foto de Luis Alcaraz

Foto de Benjamín Berdiales

Foto de Benjamín Berdiales

Finalmente pudimos identificar treinta y nueve especies: Ánsar careto, Ánsar común, Silbón europeo, Ánade azulón, Cuchara común, Ánade rabudo, Cerceta común, Perdiz roja, Cigüeña blanca, Cormorán grande, Garza real, Buitre negro, Águila imperial ibérica, Aguilucho lagunero, Aguilucho pálido, Milano real, Busardo ratonero, Grulla común, Avefría europea, Cernícalo vulgar, Halcón peregrino, Urraca común, Corneja negra, Cogujada común, Cetia ruiseñor, Mosquitero común, Cistícola buitrón, Colirrojo tizón, Tarabilla europea, Zorzal común, Estornino pinto, Estornino negro, Lavandera blanca, Bisbita pratense, Escribano palustre, Triguero, Jilguero europeo y Gorrión común.

La Tórtola europea, Ave del Año 2015

                                                                                                     Juan Varela


Cada año, desde 1988, SEO/BirdLife declara Ave del Año a una especie de ave silvestre con el objetivo de denunciar su situación o los problemas de conservación de aquellos espacios donde habita.
Según la votación realizada del Ave del Año a través de Internet, y dada a conocer en la Asamblea General Ordinaria de SEO/BirdLife el domingo 8 de Diciembre de 2014, este ha sido el resultado:

52 % de los votos para la tórtola europea
28 % de los votos para el alcaudón real

20 % de votos para la perdiz  roja

Tendencia poblacional y mapa de distribución 

Ave de mediano tamaño y aspecto grácil. Es una especie estival y relativamente común en ambientes que alternen zonas abiertas de pastizales y cultivos con zonas arboladas. Durante la migración, especialmente la otoñal, la población local se une con ejemplares procedentes del centro de Europa, con destino a las zonas de invernada africanas. A pesar de su relativa abundancia, en las últimas décadas se encuentra en marcada regresión causada por la intensificación agrícola y la excesiva presión cinegética.